Objetivos de Nuestra Escuela
Fomentar la práctica tradicional de karate-do
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Mediante las normas, pautas de comportamiento, etiqueta, cortesía en formas y particularidad observada en nuestros alumnos, tratamos de mejorar en ellos no solo cualidades físicas y técnicas sino que también psicológicas, sociales y conductuales. Se desarrolla la voluntad, la constancia, el deseo de superación, el respeto, la humildad, la expresión corporal, la obediencia y la disciplina.
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Ofrecer al practicante un método seguro y eficaz de defensa personal, ya que karate es la base de numerosos sistemas de defensa existentes, administrando una planificación idónea en función de la edad del alumno, previniendo lesiones por una práctica errónea.
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Desarrollo de la voluntad, la constancia, el deseo de superación personal y de la humildad, para aceptar nuestras propias limitaciones e intentar superarlas.
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Ayudar en la formación de la personalidad, de todos los alumnos, en función de sus necesidades.
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Aportar continuidad en el aprendizaje y práctica, independientemente de la edad y del nivel alcanzado.
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Velar y cuidar la moral deportiva y ética en todo momento.
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Que nuestra práctica en KARATE-DO sea para toda la vida, sirviéndonos como apoyo, terapia y método de canalización para afrontar los múltiples obstáculos que iremos encontrando en el día a día.
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Que desde el comienzo de nuestra actividad, vayamos siendo conscientes de valores como el honor, la palabra y la justicia.
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Evitar la violencia, y canalizar las tensiones hacia un fin positivo, gracias a un riguroso autodominio de mente y cuerpo.
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Aprender a reconocer nuestras limitaciones y nuestros progresos, para así llegar a conocernos a nosotros mismos.
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Liberar tensiones, angustias y temores, a través de la intensidad exigida en los entrenamientos y la autoestima que iremos ganando con ellos.
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Responsabilidad y formalidad han de ser una unión, la cual intentaremos alcanzar mediante la disciplina y pautas marcadas por los maestros.
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Crear una sensación de seguridad en nuestros alumnos, que una vez alcanzado cierto nivel, les irá acompañando el resto de sus vidas.
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Trasladar toda la enseñanza y conductas recibidas en el DOJO (lugar donde entrenamos), a nuestro comportamiento en la vida cotidiana.
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Que nuestros alumnos consigan el título de Cinturón Negro y posteriormente si es posible accedan a los distintos niveles o Danes (grados).
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Finalizamos estos objetivos más destacables, esperando que con el tiempo, exista un sincero agradecimiento tanto de padres, tutores y practicantes, por todo lo que KARATE-DO les ha aportado en su formación y desarrollo.
UN CAMINO DE MIL PASOS, COMIENZA CON UN SOLO PASO.
Sensei
Jesús Moreno Carrillo
Su historia.
Jesús Moreno Carrillo, se inicia en las artes marciales en la infancia a principios de la década de los 80, en Valdepeñas, su ciudad natal en el Gimnasio Galos Gym. Aun siendo muy pequeño, ya desde el comienzo de su práctica se quedó asombrado y fue consciente de los cambios conductuales que se producían con la práctica de KARATE-DO, viviéndolo él en primera persona.
Recuerda de su práctica infantil que, aunque los entrenamientos eran divertidos y amenos, también tenían en gran medida dosis de formalidad, disciplina y exigencia, lo cual le agradaba enormemente y que gracias a ello fue ganando en autoestima, tranquilidad y determinación. También valoró positivamente la continuidad que le proporcionó la práctica de KARATE, ya que no existen barreras en cuanto a nivel técnico alcanzado, de edad o de cualquier impedimento físico-técnico, que sí existen en otros deportes o artes marciales.
Su incursión en el mundo de la enseñanza, fue curioso, ya que únicamente contaba con 16 años cuando, en un pueblo vecino al suyo llamado Santa Cruz de Mudela, solicitaron un profesor de karate en un gimnasio. Y aunque sólo contaba con la experiencia de haber impartido clases esporádicamente por alguna indisposición de su profesor, en breve consiguió aumentar el número de practicantes, incluso algunos de los cuales, consiguieron medallas en los Campeonatos Regionales. En esa época compaginaba sus estudios de Técnico Superior en Electrónica con las clases de KARATE, cuando también fue llamado para impartir clases en el Excmo. Ayuntamiento de Castellar de Santiago, duplicando el número de practicantes con el que comenzó, en el primer año de enseñanza.
Únicamente en el año 1998, que fue cuando comenzó los estudios de Ingeniero Técnico en Informática de Gestión en la Universidad de Castilla la Mancha, no impartió clases, pero comenzó a practicar en el Gimnasio Shotokan de Ciudad Real, guardando un estimado recuerdo de esos años de aprendizaje.
En el 2000, inició la enseñanza en Alcázar de San Juan, lugar en el que fijó su residencia y también su compromiso se materializó en el año 2006 con la apertura de un Dojo nuevo.
Durante estos más de 40 años de práctica, Jesús Moreno ha conseguido alcanzar el Título de 7º Dan de karate, siendo el 7º Dan más joven a nivel nacional conseguido mediante examen, otorgado por la Real Federación Española de Karate, 2º Dan de Kodudo, 1er Dan de Tai Jitsu y Primer Grado de Kyusho. También obtuvo las titulaciones de Entrenador Nacional, así como de Juez Nacional B de Kata y Kumite, Juez del Tribunal Nacional de Grados y profesor de Defensa Personal, titulación otorgada por el Ministerio del Interior.
En cuanto a la faceta deportiva del arte, ha sido Campeón de Castilla la Mancha de Kata durante varios años, así como medallista en kumite. También obtuvo un cuarto puesto en el Campeonato de España Senior en kata en el año 2004, Campeón del sector centro-sur de España Universitario en el año 2001, Subcampeón de España de Karate Tradicional en el 2014 y Medalla de bronce en el Campeonato de España de karate Tradicional en el 2015.
A día de hoy, imparte clases de KARATE-DO, de lunes a viernes en los Dojos de la escuela, con las mismas ganas e ilusión con las que comenzó a enseñar hace ya más de 30 años, pretendiendo que KARATE-DO, tenga el reconocimiento y estima que le es merecido.
Y aunque se siente muy orgulloso, de los logros deportivos conseguidos por él, como por sus alumnos, sigue entrenando y enseñando a diario, para conseguir que sus alumnos alcancen los objetivos, tratando de inculcar los valores, experiencias y sentimientos que tanto le han aportado a él como budoka y persona, para que todo el que se acerque a KARATE-DO de su mano se impregne verdaderamente sin ambigüedades, del verdadero espíritu del arte.
¿Por qué elegirnos?
Al igual que existen distintas escuelas tradicionales de karate-do, también existen distintas formas de entender la práctica de karate-do. Indudablemente los que hemos practicado con distintos Maestros y hemos acogido alumnos también de distintos Maestros, comprobamos como los alumnos muestran en su práctica y comportamiento, las prioridades aportadas por sus Senseis, y cuando estas prioridades son un fiel reflejo de los valores tradicionales aportados por karate-do como respeto, constancia, afán de superación, humildad, esfuerzo y compañerismo, nos dignamos con ello. Pero también existen modelos de enseñanza que desgraciadamente no cumplen estos requisitos, y se disfrazan entre los conceptos de KARATE-DO, y es cuando los que verdaderamente apreciamos lo que hacemos nos entristecemos al comprobar que no todos lo entienden como nosotros. Si bien es cierto, que otras formas de entender la práctica que no están ligadas a los valores tradicionales del arte, les son de provecho a esas personas, no tenemos nada que enjuiciar.
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Nuestra escuela se caracteriza por el ambiente existente en ella, un entorno ameno y agradable, en la que todos formamos una gran familia donde los valores de los que nos vamos impregnando nos acompañaran el resto de nuestras vidas y nos serán de gran utilidad a lo largo de las mismas.
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Durante los más de 30 años dedicados a la enseñanza, hemos conseguido que más de 200 alumnos consigan el Titulo de Cinturón Negro y Danes, llegando algunos de nuestros alumnos hasta Cuarto Dan, con un elevado porcentaje de aprobados en la primera convocatoria.
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Porque en nuestra escuela somos consecuentes con lo que hacemos, y nuestra práctica, enseñanza y comportamiento sigue los valores pretendidos tradicionalmente por KARATE-DO, siguiendo el camino en todo momento con rectitud, seriedad, constancia y humildad, no sólo dentro de los entrenamientos sino que también en nuestra vida cotidiana.
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Porque nuestras clases, están divididas por etapas de crecimiento, para que la enseñanza se realice de una forma más objetiva y eficaz, realizando las planificaciones y métodos enseñantes en función del estadio o grupo de edad pertinente.
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Porque se pueden unir conceptos, como trabajo y esfuerzo con diversión y armonía, que es uno de los propósitos perseguidos, que encontrareis en las clases.
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Porque aunque se trate de una enseñanza grupal, siempre se tienen en cuenta las características individuales de cada practicante, intentando aportar en cada momento los requerimientos apropiados de forma personalizada.
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Porque, nuestras clases son impartidas sin límite de edad, y podrás practicar siempre que quieras, sin tener un final asociado a una edad determinada.
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Porque somos profesores titulados, y nuestra escuela es oficial. Pudiendo examinarte de todos los grados en la misma, sin tener que desplazarte a otros lugares. Siendo las titulaciones otorgadas por las Federaciones oficiales y reconocidas por el Consejo Superior de Deportes.
Horarios
ESCUELA DE ALCÁZAR DE SAN JUAN
Estamos abiertos de lunes a jueves de 16:00 a 22:30 horas.
Contacto
Secretaria 606 45 89 96 / 926 54 16 74
Jesús Moreno 646 98 55 65
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